La cumbre escarlata (Crimson Peak, Estados Unidos, 2015) / Dirección: Guillermo del Toro.
Reparto: Mia Wasikowska, Jessica Chastain, Tom Hiddleston, Charlie Hunnam, Doug Jones, Javier Botet, Jim Beaver, Burn Gorman, Leslie Hope, Kimberly-Sue Murray, Emily Coutts, Gillian Ferrier, Matia Jackett, Martin Julien. / Guión: Guillermo del Toro, Matthew Robbins, Lucinda Coxon. / Fotografía: Dan Laustsen. / Música: Fernando Velázquez. Estreno viernes 30 de octubre de 2015.
por: Enrique López Arvizu
Un amor violento.
La nueva película de Guillermo del Toro es el resultado de la maduración de un amor al cine y sobre todo al género al que más se lo relaciona, el terror, y aunque su nueva película tiene casas habitadas por fantasmas, es lo gótico lo que prima en un relato lleno de sutiles referencias.
Como una película de otra época, ‘La cumbre escarlata’ se decanta por crear una atmósfera y tomarse bien su tiempo para ir narrando los hechos de la historia donde un amor se tornará impetuoso y oscuro, dejando los “sustos” de lado aunque hay un par de escenas que los incluye y son efectivos.
Mia Wasikowska es Edith Cushing, una joven aspirante a escritora de historias de fantasmas a la que su posible editor rechaza por ser mujer y ubicarse más cercana a Mary Shelley, la autora de Frankenstein, que a Jane Austen. Ella vive con su padre, un hombre viudo de una respetable posición económica, pero todo cambia cuando de Gran Bretaña llega un enigmático tipo que presume su título de baronet, Thomas Sharpe (Tom Hiddleston), con la intención de conseguir financiamiento para un proyecto industrial, acompañado de su hermana Lucille (Jessica Chastain).
Ante la posibilidad de un enamoramiento entre su hija y el extraño tipo, el padre desconfiado de los misteriosos hermanos decide investigarlos pero una mañana es violentamente asesinado, ante lo cual Edith viajará con Thomas con quien se casará y quien compartirá junto a su ahora cuñada una imponente y decrépita casa donde irá descubriendo de a poco algunos misterios que ahí se alojan.
Centrada en un clasicismo puro, Guillermo del Toro consigue su mejor película con guiños a ‘Rebecca’ de Hitchcock, ‘La caída de la casa Usher’ de Roger Corman que está basada en una historia de Poe, o a las producciones de la Hammer (el apellido Cushing remite al protagonista de algunas de sus películas), ‘The innocents’ de Jack Clayton y hasta algo de Mario Bava, en una historia poco rebuscada y que basada en esa sencillez, potencia sus varias virtudes.
Y es que si bien algunos hechos que suceden en la parte climática del filme pueden entreverse, es la forma en que se llega a esos momentos por lo que vale la pena visualizar una película como la que propone Guillermo del Toro, de una poderosa belleza visual y narrativa poco común en el cine contemporáneo, y que se arriesga además a narrar una historia de amor gótico con algunos momentos cercanos al horror.
Además cuenta con un elenco virtuoso donde se destaca Jessica Chastain, y también virtuoso es el trabajo de los diferentes rubros, como el arte, el vestuario y la fotografía, y un director que como pocos hoy en día entiende y ama el género, para conseguir una película que perdurará inevitablemente como un referente de lo mejor del cine de este todavía nuevo siglo.