Miss Peregrine y los niños peculiares (Miss Peregrine’s Home for Peculiar Children, Estados Unidos, 2016) / Dirección: Tim Burton.
Reparto: Eva Green, Asa Butterfield, Samuel L. Jackson, Judi Dench, Ella Purnell, Allison Janney, Rupert Everett, Terence Stamp, Kim Dickens, Chris O’Dowd, Finlay MacMillan, Cameron Greco, O-Lan Jones, Justin Davies, Bomber Hurley-Smith, George Vricos, Andrew Fibkins, Bryson Powers, Jack Fibkins, Hayden Keeler-Stone, Lauren McCrostie. / Guión: Jane Goldman (Novela: Ransom Riggs). / Fotografía: Bruno Delbonnel. / Música: Matthew Margeson, Mike Higham. Estreno viernes 30 de septiembre de 2016.
por: Enrique López Arvizu
Los niños X.
Después de varias decepciones con algunas de las películas que ha dirigido durante la presente década, Tim Burton se embarca en adaptar una historia que parece ideal para llevarla a la pantalla grande, basada en la novela de Ramson Riggs.
Ante el repentino y trágico fallecimiento de su abuelo, Jacob (Assa Butterfield) decide ir a Gales a buscar un hogar donde habitan algunos niños especiales de los que su abuelo le contó algunas historias y le mostró fotografías sorprendentes y donde un tiempo él también vivió ahí.
Al llegar al lugar, Jacob lo descubre en ruinas y abandonado, pero al entrar, un grupo de chicos le guían para seguir un camino que los llevará al lugar y tiempo correcto, donde Miss Peregrine maneja el hogar que cuida y protege a un grupo de chicos con habilidades especiales que están siendo cazados por unos seres hambrientos.
La primera parte de la película es lo más cercano que Burton ha realizado en los años recientes que se asemeje a los grandes títulos que nos entregó en la década de los 90, donde la perfecta mezcla de fantasía en un mundo real y sus personajes excéntricos le permite a Burton acercarse a la esencia de ese cine que lo convirtió en un director de culto.
Uno de los grandes aciertos del film es la inclusión de Eva Green como Miss Peregrine, quien con su enigmática personalidad llena los zapatos de la encargada de proteger a los niños, pero que sin embargo en el último tercio de la película desaparece, cosa que el relato lo resiente bastante.
Lastimosamente, en ese último acto, a la ausencia de Green se suman otros desaciertos que restan méritos a la película, donde la narración se siente descontrolada y con desajustes de ritmo y tensión, además las peculiaridades de cada uno de los niños no son del todo bien aprovechadas y los efectos especiales terminan imponiéndose en secuencias de acción no muy logradas (como si fuera una versión en pequeño de los ‘X-Men’, saga con la que comparte guionista), pero al menos queda la sensación de que el mejor Burton parece estar de regreso.