Gerontophilia (Canadá, 2013) Director: Bruce LaBruce. / Reparto: Pier-Gabriel Lajoie, Walter Borden, Katie Boland, Marie-Hélène Thibault, Yardly Kavanagh, Jean-Alexandre Létourneau, Brian D. Wright, Nastassia Markiewicz. / Guión: Bruce La Bruce, Daniel Allen Cox. / Fotografía: Nicolas Canniccioni. / Música: Ramachandra Borcar. Vista en la 3era Muestra Internacional de Cine Queer de la Cineteca Nuevo León.
por: Enrique López Arvizu
El amor no tiene edad.
Bruce LaBruce presenta su película más accesible, por decirlo de alguna manera, pero no por eso distante al resto de su filmografía, que al fin y al cabo todas tratan el mismo tema: el amor.
Lake es un chico que trabaja como salvavidas, vive con su madre, tiene una novia feminista y gusta de los hombres mayores. Su madre consigue un trabajo en un geriátrico y también le consigue empleo a su hijo en el mismo lugar.
Allí Lake conocerá al señor Peabody, un hombre de más de 80 años de quien se enamorará mientras lo atiende. Lake tendrá que hacerle frente a una sociedad que rechaza en automático todo lo diferente. Ni siquiera su insurrecta novia lo asimila del todo bien.
A LaBruce le gusto provocar y ahora presenta una historia de un amor subversivo, que transgrede todo orden y lo hace de una manera luminosa, cada acción de sus personajes significa una lucha contra lo establecido, con el amor como arma principal.
Lejos de los lugares tan transitados por películas de temáticas similares, acá no hay lugar para el escándalo ni grandes tragedias, por el contrario, el cine de LaBruce es un riesgo constante, y se permite jugar con pasajes propios que recuerdan algunas películas anteriores, en claves de sueños o estados mentales productos del gozo, usando ralentíes, colores, subjetivas y una banda sonora inmejorable.
Y más allá de un discurso dignificador para con las personas de la llamada tercera edad, Gerontophilia nos recuerda que el amor y la pasión no se extingue con los años y que los viejos no son sólo un bulto que debe ser olvidado al dejar de ser importantes para una sociedad que los condena a una terrible soledad.
En Gerontophilia el humor está presente como en todo el cine de su director, LaBruce se permite momentos que aligeran el relato pero que no le restan potencia ni honestidad a una historia de un amor a contracorriente y revolucionario; una película totalmente disfrutable, que difícilmente saldrá de la cabeza de quienes la miren.
[Calificación: 9/10]