Assassin’s Creed (Assassin’s Creed, Estados Unidos, 2016) / Dirección: Justin Kurzel.
Reparto: Michael Fassbender, Marion Cotillard, Jeremy Irons, Charlotte Rampling, Brendan Gleeson, Michael Kenneth Williams, Ariane Labed, Brian Gleeson, Carlos Bardem, Hovik Keuchkerian, Javier Gutiérrez, Matías Varela, Denis Ménochet, Dino Fazzani, Gabriel Andreu, Megan Affonso. / Guión: Adam Cooper, Bill Collage, Michael Lesslie (Videojuego: Patrick Désilets, Corey May, Jade Raymond). / Fotografía: Adam Arkapaw. / Música: Jed Kurzel. Estreno jueves 05 de enero de 2017.
por: Enrique López Arvizu
Los videojuegos y el cine no se llevan.
La relación de los videojuegos con el cine no ha sido del todo buena, las transposiciones que se han realizado de videojuegos adaptados a la gran pantalla ha sido desafortunadamente en la gran mayoría de sus oportunidades, ‘Assasin’s Creed’ parecía ser una excepción, pero se queda a medio camino.
La historia inicia con un prólogo ambientado en Andalucía más de cinco siglos atrás, poniendo en antecedentes a los que poco sabemos de la historia, para pronto volver al presente y presentar al personaje principal, Callum Lynch (Michael Fassbender), primero en su niñez y después en su etapa adulta, donde descubrirá que es descendiente de Aguilar, un caballero español perteneciente a una organización secreta llamada Assassins.
Dicha organización lo recluta de manera forzada para que, ayudado por una nueva tecnología al mando de Sofia (Marion Cotillard), indague en los recuerdos de Aguilar y así poder encontrar el fruto del Edén, clave para derrotar a sus enemigos los Templarios.
La película trata de condensar su muy larga historia base a lo largo del metraje, lo que da como resultado un filme irregular, con un inicio prometedor que conforme avanza se va estancando hasta llegar a reciclar situaciones, que encuentra sus mayores virtudes en el aspecto visual.
Kurzel se rodeó de los protagonistas de su anterior película, ‘Macbeth’, otro derroche visual, para adentrarse en esta película que apenas consigue por momentos atrapar al espectador común, sobre todo porque su historia está narrada de tal manera que si no se conoce la historia previamente, tanta información llega a abrumar.
Si bien presenta algunas secuencias de acción bastante logradas, sobre todo las que tienen acción en el pasado que es lo mejor de la película y que resulta muy entretenido, la historia se centra en el presente, con una dinámica bastante limitada lo que no ayuda al ritmo del relato, que termina dejando todo listo para las posibles secuelas, aunque con un inicio que se queda a medio camino.