Un pasado imborrable (The Railway Man, Australia-Reino Unido, 2013) Director: Jonathan Teplitzky. / Reparto: Colin Firth, Nicole Kidman, Jeremy Irvine, Stellan Skarsgård, Hiroyuki Sanada, Sam Reid, James Fraser, Marta Dusseldorp. / Guión: Frank Cottrell Boyce, Andy Paterson. / Fotografía: Garry Phillips. / Música: David Hirschfelder. Estrenada el 19 de junio de 2014.
por: Enrique López Arvizu
Pecados de guerra.
Eric Lomax era un oficial del ejército británico que fue apresado por el ejército japonés en Singapur durante la Segunda Guerra Mundial, después fue obligado a hacer trabajos como esclavo, en la construcción del ferrocarril que uniría Tailandia con Birmania, que también se cuenta en la clásica ‘El puente sobre el río Kwai’ de David Lean.
Lomax es un apasionado de los trenes, los japoneses descubren algunos dibujos que ha realizado y sospechan que es un espía, lo encierran y lo torturan.
Ya siendo un hombre adulto, (interpretado por Colin Firth), conoce en un viaje en tren a Patti (la ahora inexpresiva Nicole Kidman), se enamorarán y cuando todo parece venir bien, Lomax deberá enfrentar los traumas causados por la experiencia de la guerra.
Filmada de manera muy académica, correcta, y con el mismo tono en cuanto a las actuaciones y ciertos discursos, Un pasado imborrable se enfrenta una vez más a todo lo que un acto tan repudiable e inservible como la guerra genera en los hombres, y como éstos son incapaces de decidir por sí mismos ante el rol que les toca ejecutar.
Pero el filme dirigido por Teplitzky se ubica solo de un lado del conflicto, de los aliados, del ejército inglés, y arremete con todo contra los japoneses. Los soldados ingleses son representados todos como chicos guapos, agradables, brillantes, bienintencionados, mientras que su contraparte japoneses son todo lo contrario, vilanos de cartón, con negras intenciones y mal encarados.
El romance entre los personajes de Kidman y Firth queda reducido a una mera anécdota, y el peso de la trama se carga en el personaje conflictuado que deberá hacer frente a un pasado doloroso frente a uno de los personajes que lo han traumatizado.
La narrativa se trompica con las constantes idas y venidas temporales que entorpecen el relato hasta llegar a un cierre que se pretende profundo y reflexivo, pero cuyo impacto ha sido disminuido por todo el amañamiento previo que termina por jugarle en contra.
[Calificación: 5/10]