El penthouse (The Loft, Estados Unidos-Bélgica, 2015) / Dirección: Erik Van Looy.
Reparto: Karl Urban, James Marsden, Eric Stonestreet, Matthias Schoenaerts, Wentworth Miller, Isabel Lucas, Rachael Taylor, Margarita Levieva, Rhona Mitra, Elaine Cassidy, Valerie Cruz, Kali Rocha, Kristin Lehman, Robert Wisdom, Ric Reitz. / Guión: Bart De Pauw, Wesley Strick. / Fotografía: Nicolas Karakatsanis. / Música: John Frizzell. Estreno viernes 14 de agosto de 2015.
por: Enrique López Arvizu
Amigos son los amigos.
No es muy común pero existen algunos casos de directores que realizan un remake a su propia obra con la producción de un gran estudio, práctica realizada por algunos directores que habían emigrado al naciente Hollywood y hacían nuevas versiones con la idea de lograr una mayor distribución de alcance mundial, y que en los últimos años directores como Michael Haneke y el japonés Takashi Shimizu han retomado con diferentes resultados.
Parecido es el caso del director belga Erik Van Looy, que realiza una nueva versión de su film de 2008, ‘Loft’, sólo que ahora con coproducción norteamericana donde cuenta la historia de cinco amigos, todos casados y de buena posición económica que deciden comprar un lujoso penthouse donde cada uno podrá disfrutarlo cumpliendo con ciertas reglas, hasta que una mañana encuentran el cuerpo sin vida de una joven mujer, pasando todos a ser sospechosos.
Así el grupo de amigos intentará clarificar lo sucedido antes de la intervención de la policía, pasando por diferentes estados donde de la colaboración y comprensión pasan a sospechar todos de cada uno de ellos, quienes son las únicas personas que poseen llave del lugar, y todos con una personalidad distintiva que los vuelve poco queribles y sin posibilidades de sentir empatía para con ninguno.
El relato transita entre diferentes ventanas temporales, donde se mezclan los momentos previos al suceso con imágenes de un peculiar interrogatorio, quedando como el fin último de la película revelar la identidad del asesino, tejiendo para ello una maraña de eventos que los involucra todos y que pasa la estafeta del culpable de uno en uno, pero sin conseguir en ningún momento un clima de genuina tensión.
Valiéndose del ejercicio de satisfacer fantasías propias del género masculino, y pretendiendo después con ello dar toda una lección moral, ‘The Loft’ termina siendo un thriller sin suspenso, y monótono, con una absurda vuelta de tuerca que desperdicia una premisa que prometía mucho más.